La estación de Radegast, en Lodz, es el monumento conmemorativo que, quizás, nos ha marcado más en el viaje a Polonia.
En esta estación, que se conserva en perfecto estado, hay tres vagones de ganado originales que fueron usados para el transporte de los judíos de la ciudad de Lodz.


Esta estación fue el principal centro de deportación hacia los campos de exterminio.