La longitud total del istmo es de 98 km de los cuales, 52 km pertenecen a Lituania y el resto forma parte de Rusia. La anchura va de los 400 metros hasta los 3.800 metros separando la laguna de Curlandia del mar Báltico.
El istmo, según la leyenda, se dice que fue creado por la giganta marina Neringa transportando en su delantal arena que colocó para crear un puerto protegido para los pescadores locales.
Lo cierto es que el istmo fue creado hace miles de años, cuando el viento y las olas del mar Báltico empezaron a acumular arena en las aguas poco profundas cercanas a la costa.
La masiva deforestación durante el s. XVI provocó el inicio de los movimientos de la arena empujada por los vientos. El estado desértico de la zona hizo que se le llamara el "Sáhara Lituano".
El paisaje actual del istmo fue realizado por los residentes de la zona en su contienda contra el viento, que empujaba la arena hacia los asentamientos y pueblos de pescadores. Durante el siglo XIX el gobierno prusiano lanzó una reforestación muy importante en un intento de frenar el avance de las dunas. Debido a esta unión entre naturaleza y hombre en la configuración del paisaje, el istmo de Curlandia fue declarado parque nacional y fue incluido en la lista de Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en el año 2.000